lunes, 25 de enero de 2010

Comprensión

Siento que podría decir tantas cosas, y de esta manera mantenerme en mi clásica enumeración caótica, con la que he vivido siempre, porque nunca se muy bien porque empezar... aunque ya tengo una idea. =)
Bueno, el espiral infinito de carrete novato previo a la entrada a clases ya empezó, y ahora me pude dar cuenta de que cuando me decían: "Vale, tu vida va a cambiar cuando entres a la U", era la más pura verdad. La junta del inter fue bien piola, conocí a mucha gente, me tomé fotos, blablablabla.... y esto es lo que me da rabia, y que al mismo tiempo me provoca admiración, como la que se siente al ver algo que realmente nos detiene el corazón . Me sentí cómoda, en un buen ambiente, con buenas vibras, etc, pero no logré sentir compañía, todo era tan típico y esperable, todo era tan dentro de las espectativas, tan particularmente común que me descolocó en un nivel casi desconocido. No me desilusione. No me aburrí. Pero de esta misma manera, no pude sentir esa chispa de entusiasmo que los otros parecían sentir. Me sentí tan ajena, quise gritar, gritar para sentir que no estaba entumecida, como me sentí. Nada era tan bueno, como tampoco nada era tan malo. Pero hablando con la verdad, después de eso llegó lo mejor.
Fue el conocer a la gente, que me dieran un espacio,en ese momento ya no tuve ganas de gritar, solo quise correr, correr para alcanzar las posibílidades, y ahí me di cuenta de que no existen remedios para curar los misterios. Son esos momentos en que realmente hay gente que está ahí, en ese momento exacto, contigo, y esa es la sensación de que todo está bien, ese sentimiento calientito y peludito, por el que gente baila hasta el amanecer, canta o sonríe sin razón alguna en la calle, ahí estaba esta suerte de epifanía, pegandome como un palo en la cara.
Puedo decir que comprendí las cosas, no sirvo para los grupos grandes de gente, para los besos sin amor, para las carreras por el pasto, ni para tomar cerveza. Pero si sirvo para: comer chocolate, escuchar música, abrazarte cuando lo necesites, cuando quieras hablar puras cosas sin sentido que algún día nos parecerán verdades absolutas y para todo aquello que se te ocurra.
Comprendí que hay que abrir bien los ojos y dar oportunidades, pero de las buenas, ya que mucha gente las merecerá. Que no hay que cerrarse a esperar solo cosas malas, hay que esperar lo mejor y de los mejores. Estoy feliz, y me cuesta acostumbrarme, aun sigo un poco entumecida, pero la morfina para esas enfermedades misteriosas de la conciencia, siempre se puede encontrar en los amigos que te tienden la mano para que les tomes todo el brazo.
Tal vez nunca deje de estar entumecida, o tal vez, de un día para otro, esto se acabará. No lo sé, pero ya me acostumbre a vivir así, y me agrada. Ya estoy divagando demasiado, y no estoy llegando a ninguna conclusión factible, juntaré mis fuerzas y se las trataré de contar de una manera no muy críptica e incomprensible.

Cirugías mayores, requieren a cirujanos especializados. Espero no dejar de sentir mil cosas, pese a mi entumecimiento crónico, porque hay muchos amigos abriendo puertas, y si no entro ahora, no las volverán a abrir, cada persona es un oportunidad única de un mundo diferente, y eso no es morfina, es cura.

sábado, 16 de enero de 2010

Brisas diferentes

Creo que lo más novedoso de empezar de nuevo es la visión que adopatmos frente a las cosas, como si después de lo vivido anteriormente nada nos pudiera sorprender, aunque pese a esto hay cosas que no dejan de captar mi atención, como:

  1. Derramar un vaso de bebida, dos veces, una después de la otra, y en el mismo lugar, cosa que me hizo sentir rematadamente torpe... fuera de lugar en la especie humana.
  2. El hecho de que mi mamá esté durmiendo siesta tapada con una frazada pese a que hacen 30 y muchos grados de calor.
  3. Que hoy día sea una de las tantas ocasiones en que voy a ver una película francesa, llorona y con tintes expiativos, sola.
  4. Que aun me queden cigarros en la cajetilla q compré ayer.
  5. Haber visto un camión rojo gigante pasar por fuera de casa central, y que con letras blancas gigantes decía el nombre en el que estaba pensando.
  6. El haber ido al gimnasio todos los días hábiles de esta semana por que no tenía nada mejor que hacer.
  7. Que aun existan hombres que crean que un auto "enshulado" y con raggaeton a toda potencia les fascina a las mujeres.
  8. Que volví a hacerme un face, y sigo siendo la misma psyco de siempre.
  9. El poder sanador y renovador del tiempo
  10. Que me gusta tanto ver las teleseries brasileñas del canal 13 a la hora de almuerzo, que los fines de semana siento el vacío que deja su ausencia en mi vida diaria.
  11. Que aun no he visto "Bastardos sin gloria"
  12. Lo increibles que son las canciones de oasis, que cada vez que las escucho tienen un nuevo significado.
  13. Que voy a cumplir 19 años y sigo siendo un pollo, con un poco más de manejo de las situaciones... es decir..... un pollo q está menos perdido, pero al fin y al cabo, un pollo.
  14. Que con el calor que hace todavía se pueda ver en la calle a personas que andan con zapatillas.
  15. Que la ferno se fue hace tano tiempo.
  16. Que no haya pasado nada concreto en la cumbre de Copenhage, pese a que el calentamiento global y las catastrofes ambientales son un hecho presente en la actual histeria colectiva´.
  17. Que todavía me entusiasme andar en micro.
  18. El hecho de no querer estudiar derecho, porque ya se me quitaron todas las ganas.

Enrealidad podría decir una serie de cosas más, lo que pasa es que hoy es uno de esos días en que recepciono la información de una manera criptica y extraña. No se porque me siento tan fuera de lugar, me siento aburrida, demasiado aburrida, y tal vez eso me lleva a la sensación de estar perdida frente a lo que escribo.

Puedo recordar el jueves por la noche con la caro, fue un momento de extasis, por ningún motivo el desenlace, ya que si ha de ser algo fue un climax, todo era tan hermoso y brillante, y así, de esta manera tan simple, me sentí feliz. Como cuando puedes detenerlo todo, y puedes decir exactamente que en ese momento estás siendo feliz, aunque el recuerdo se dibuje y desdibuje una y mil veces, seguirá ahí. Una vez que lo dices, sabes que es una meta que podrás cumplir otras veces.

Me estoy dando demasiadas vueltas para decir algo muy simple. Pese al aburrimiento y al caos q siento, soy feliz. Porque tengo el caos de quien tiene algo que hacer, de quien tiene algo que esperar de la vida, y la magia está en nunca dejar de esperar cosas nuevas, ya sean buenas o malas, no dejar de sorprendernos y de ver las cosas con la magia de quien las ve por primera vez, ya que en nuestra vida las podemos contemplar, o hasta participar de ellas mil veces, pero solo viviremos una vez para hacerlo.

Espero que la película sea buena, para los interesados se llama "Un día lo comprenderás", el nombre tiene potencial, después les contaré como estuvo!

martes, 12 de enero de 2010

Aclarando

La verdad es que podría dar un gran saludo de bienvenida, podía hablar de lo que me motiva a tener este blog, de las vueltas de la vida, de un gran hito de mi vida que me haya hecho ver la luz y ponerme a escribir... pero estaría mintiendo, no estoy aquí por eso, probablemente en el futuro si escriba de estas cosas, pero ¿ahora?, no lo creo.
Creo que ahora la verdad empieza, se descrubre, comienza mi momento favorito del día, y de lo que más quiero hablar es de ayer.
Ayer me encontraba a las 9 pm en la plaza concha y toro, con pancho, y me puse a mirar catatónicamente la pileta, tiendo a tener un poco de catatonia, entre una serie de desordenes más, pero no es el tema de hoy. Hablabamos de la vida, lo divino, el alma, lo humano y los mocos cuando a eso de las 9:15 se prenden las luces de la pileta, y el agua se iluminó y en el correr de ella pude ver la vida. Pude ver los últimos 18 años en una perspectiva de kilometros, como si esa persona no fuera yo, como si estuviera en un edificio muy muy alto mirando hacia abajo a las hormigas bien trajeadas y estresadas, listas para ser quemadas con una lupa. Todo era tan lejano, todo, y por un momento me di cuenta de q esas luces tan tenues parecían cegarme, las luces del pasado nunca se extinguirán, porque no existe interruptor que pueda apagarlas, nada las va a quitar de ahí. PERO, y este si que es uno grande, más allá se veían otras luces, más brillantes pero todavía lejanas, esas eran las luces vagas del futuro que cada día es más hoy, uno en el que ya no estoy en medio delimbos pasados, sino que estoy en el punto de partida, y me di cuenta de que había una parte de mi que ya no estaba conmigo, una que ya se había ido, que antes traté de expulsar, y que ,voluntariamente, en ese momento se fue, sin siquiera despedirse, porque sabe que hay ciertas despedidas que son mejores si nunca se realizan.
Puedo equivocarme cien veces más en lo que quiera, porque tengo preguntas y sé que en la busqueda está la respuesta, y espero seguir agregando nuevas perspectivas, portales místicos y dimensiones, a todo lo que me rodea, porque nunca nada es solo lo que se ve, ni lo que se piensa. Entonces ¿vale la pena arriesgarse?
Todos los días.